Cap56 - COLABORACIONES - I

Hace unos meses conocíamos la empresa de bioconstrucción ecoop como constructores en el proyecto pionero de "Pájaros en la Cabeza" en Ciudad Real. Cap42 - Bombos V

Esta empresa pionera en la provincia de Ciudad Real estrena una remozada web y pone en marcha un blog. Me han propuesto estrenar dicho blog (algo que es un grato honor) para abordar la arquitectura tradicional, la viabilidad en su rehabilitación y su nexo de unión con lo que ahora llamamos arquitectura sostenible.

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La rehabilitación de la arquitectura tradicional como valor añadido

Conocer la arquitectura tradicional es adentrarse en construcciones llenas de posibilidades, historia, cultura, forma de vida tradicional, diseños eficientes, materiales sostenibles; en definitiva, una eficiencia y encanto sólo al alcance de esta arquitectura popular.

La diversidad de tipologías que nos ofrece la arquitectura vernácula en función del medio donde se construye y fin para el que se destina es de gran envergadura. Simplemente centrándonos en el caso manchego encontramos desde viviendas populares en el medio urbano hasta viviendas en el medio rural como son las quinterías, silos, cuevas o bombos. Complementando estas viviendas existe un extenso patrimonio industrial integrado en estas construcciones: bodegas, almazaras, norias, albercas, molinos –tanto hidráulicos como de viento- son algunos ejemplos de este patrimonio industrial centenario que cuenta con un gran potencial turístico.

Variedad tipológica en la arquitectura vernácula

Estas construcciones centenarias, que pueden considerarse sin lugar a duda patrimonio, tienen el valor añadido que sólo el paso del tiempo es capaz de transmitir. Por tanto, estamos refiriéndonos a un legado histórico y cultural que, contrariamente a lo que se piensa, no está obsoleto constructivamente.

La eficiencia en esta arquitectura vernácula se basa en diseños ya probados por la propia experiencia durante siglos. La dificultad en el acceso a los recursos energéticos propicia el aprovechamiento y optimización de la energía mediante el empleo de técnicas constructivas sostenibles unido al empleo de recursos locales. La distribución de estancias, orientación o ventilación se basa en estos principios sostenibles dando lugar a un edificio con un consumo de energía reducido, un edificio casi autónomo energéticamente. 

El patio manchego procedente del legado romano y su eficiencia energética

El acceso a nuevas fuentes de energías desde mediados del siglo XX conlleva el abandono de este tipo de arquitectura primando otros criterios menos sostenibles a la hora de la construcción. Es más, desde esa época se reforma a la arquitectura popular con nuevas técnicas constructivas y materiales incompatibles con los sistemas constructivos tradicionales. Podríamos indicar que se altera el mecanismo imperceptible y sostenible de estas construcciones. Esto motiva que se llegue a considerar de mala calidad los muros de tapial, se consideren innecesarios los patios de distribución y se implante una visión de la construcción donde lo tradicional no tiene cabida. 

Un modelo de construcción que ha dejado en la estacada la construcción tradicional

Y ya entrados en el siglo XXI nos damos cuenta que este modelo de construcción y energético implantado en el siglo XX tiene sus horas contadas. El consumo energético por vivienda se dispara, se vislumbra un futuro con escasez de recursos energéticos convencionales y el medio ambiente parece ser el gran perjudicado en medio de esta vorágine contaminante. “Vistas las orejas al lobo”, los estados comienzan a regular tímidamente el consumo energético de los edificios mediante un mejor diseño y la eficiencia en las instalaciones –aunque no por ello sin contradicciones (p.e. peaje solar)-. Realmente sólo son los pequeños colectivos concienciados, algunos arquitectos e investigadores los que ven en una arquitectura sostenible con el medio ambiente el futuro, no sólo de la arquitectura, sino de la humanidad.

Una arquitectura sostenible, ecológica, verde, de consumo nulo… -la terminología es variada- pero que tiene en la arquitectura vernácula un fiel reflejo de sus intenciones. Se recuperan conceptos perdidos como la inercia térmica presente en los gruesos muros de tapial o mampostería o se reintroduce la tierra como material de construcción ligándose con materiales compatibles como la cal. Nuevos diseños de viviendas semienterrados por una envolvente de tierra tienen su fiel reflejo en los silos o cuevas de quintería repartidos por Andalucía y La Mancha. En otros casos se extrae la esencia de la técnica constructiva de los bombos (cubillos, chozos, barracas) mediante falsa cúpula para extrapolarla a la construcción de domos. 

Del Bombo al Domo. La bioconstrucción tiende la mano a la arquitectura tradicional

La arquitectura popular, además de ser fiel reflejo para la arquitectura sostenible, tiene la singularidad de ser por sí misma arquitectura sostenible y el valor añadido de ser pieza clave para entender la cultura, historia e identidad de una comarca.

Fuentes de consulta:

- FEDUCHI, Luis. (1974). Itinerarios de arquitectura popular española

- FISAC, Miguel. (1.985) Arquitectura popular manchega

- ALONSO, Chalo. Qué podemos aprender de la arquitectura popular http://chaloalonso.com/2013/05/15/que-podemos-aprender-de-la-arquitectura-popular/

- CEJUDO LORO, David. Arquitectura popular manchega www.arquitecturapopularmanchega.blogspot.com.es

- Proyecto BIOURB - diversidad bioconstructiva www.biourb.net

- Manual para la conservación y rehabilitación de la diversidad bioconstructiva http://biourbhost.net/descargas/Manual%20de%20Conservacion/Manual%20Biourb%20ES.pdf